Liliana Bodoc, nacida el 21 de julio de 1958 en Santa Fe y fallecida el 6 de febrero de 2018, es una de las figuras más destacadas de la literatura argentina contemporánea. Reconocida por su innovador estilo literario y su capacidad para entrelazar la fantasía épica con elementos de la cultura latinoamericana, Bodoc ha dejado un legado perdurable en la literatura. Su obra no solo ha cautivado a lectores de todas las edades, sino que también ha contribuido significativamente a la evolución del género en Argentina.

Un estilo literario único
Liliana Bodoc es mejor conocida por su trilogía «La Saga de los Confines», que incluye las novelas «Los días del Venado» (2000), «Los días de la Sombra» (2002) y «Los días del Fuego» (2004). En esta saga, nos presenta un universo de fantasía épica con una clara influencia de la cosmovisión indígena latinoamericana, una perspectiva inusual y refrescante en un género dominado tradicionalmente por influencias europeas.

El estilo de Bodoc se caracteriza por su lenguaje poético y su habilidad para construir mundos complejos y ricos en detalles. Sus descripciones vívidas y su prosa lírica transportan a los lectores a paisajes imaginarios que, aunque ficticios, resuenan con la realidad histórica y cultural de América Latina. La mezcla de mitología, historia y política en sus narrativas ofrece una lectura profunda y multifacética, invitando a reflexionar sobre temas universales como el poder, la resistencia y la identidad.

Contribución a la literatura argentina
La contribución de Liliana Bodoc a la literatura argentina es significativa en varios aspectos. Primero, su capacidad para fusionar la fantasía épica con elementos de la cultura latinoamericana abrió nuevas posibilidades dentro del género, demostrando que la fantasía no necesita limitarse a escenarios medievales europeos. Esta innovación ha inspirado a otros escritores a explorar sus propias raíces culturales en sus narrativas fantásticas.

Además de su obra en el género de fantasía, Bodoc también escribió poesía, literatura infantil y juvenil. Su versatilidad como escritora le permitió conectar con una amplia audiencia, y su enfoque en temas universales y atemporales ha hecho que sus obras sean relevantes para lectores de todas las edades.

Bodoc también fue una activa defensora de la literatura y la educación. Participó en numerosos talleres literarios, conferencias y actividades educativas, fomentando la lectura y la escritura entre los jóvenes. Su compromiso con la promoción de la literatura como herramienta de transformación personal y social es una parte integral de su legado.

La saga de Los Confines

“Y ocurrió hace tantas Edades que no queda de ella ni el eco del recuerdo del eco del recuerdo. Ningún vestigio sobre estos sucesos ha conseguido permanecer. Y aun cuando pudieran adentrarse en cuevas sepultadas bajo nuevas civilizaciones, nada encontrarían”.

La saga de Los Confines la obra de Liliana más reconocida en el mundo. Fue traducida al inglés, polaco, italiano, francés, holandés, japonés y portugués. Consta de tres libros: Los días del venado (2000), Los días de la sombra (2002) y Los días del fuego (2004). También publicó, en 2012, Oficio de búhos, un libro de cuentos ambientado en el mundo de los confines durante los sucesos de la saga.

En una primera lectura, se podría afirmar que la trilogía se encuentra dentro del subgénero de fantasía conocido como «alta fantasía», cuyo principal representante es El señor de los anillos de J.R.R. Tolkien. Se distingue por estar en un mundo diferente al nuestro, con sus propias normas, magia y criaturas fantásticas. El mundo de Tolkien cuenta con la presencia de elfos, enanos y orcos. Los temas principales de este subgénero son la lucha del bien contra el mal, un héroe, generalmente reacio, obligado a madurar rápidamente, y un señor oscuro, que es la encarnación de todos los males.

Si bien la saga de Los Confines respeta estos patrones, también adopta un enfoque distinto. La mayor parte de la historia se desarrolla en las Tierras Fértiles, un continente que nos evoca a Sudamérica. Las culturas de los personajes principales nos recuerdan a los pueblos originarios, en cuanto a sus atuendos, peinados y costumbres, así como su espiritualidad, tradiciones, dioses y su relación con la muerte.

No obstante, la dicotomía entre el bien y el mal planteada por Bodoc difiere de la propuesta por Tolkien, al estar atravesada por conceptos tales como «colonización». Misáianes, el principal enemigo, reside en otro continente y sus fuerzas llegan a las Tierras Fértiles en barcos que los habitantes nativos nunca habían visto antes, y utilizan armas de pólvora, también desconocidas para los pobladores de las Tierras Fértiles 

Legado y relevancia posterior
El legado de Liliana Bodoc continúa vivo a través de sus obras y de la influencia que ha tenido en la literatura contemporánea. «La Saga de los Confines» sigue siendo una lectura obligada para los amantes de la fantasía y es estudiada en escuelas y universidades por su riqueza literaria y cultural. Las historias de Bodoc no solo entretienen, sino que también educan e inspiran, ofreciendo una visión alternativa de la historia y la mitología.

En reconocimiento a su contribución a la literatura, recibió numerosos premios y distinciones, tanto en Argentina como a nivel internacional. Estos honores son testimonio de su talento y de la importancia de su obra en el panorama literario global.

A lo largo de su carrera, Liliana supo crear un espacio único en la literatura de fantasía, dando voz a las historias y mitologías de América Latina. Su influencia se extiende más allá de las páginas de sus libros, inspirando a futuras generaciones de escritores a explorar y valorar sus propias identidades culturales en sus obras.