Nicolás Guillén, nacido el 10 de julio de 1902 en Camagüey, Cuba, es reconocido como uno de los poetas más influyentes del siglo XX en el ámbito hispanoamericano. Su obra, profundamente enraizada en la cultura afrocaribeña y en la lucha por la justicia social, ha dejado una huella imborrable en la literatura y la historia de Cuba y más allá.

La poesía de Nicolás Guillén
La poesía de Guillén es un reflejo de su compromiso con la realidad social y política de su tiempo. Desde sus primeros poemarios, como «Motivos de son» (1930), se puede apreciar su estilo único, que combina elementos de la poesía tradicional española con ritmos y temas afrocaribeños. Este estilo, conocido como «poesía negra» o «negrismo», busca reivindicar la cultura africana en un contexto de opresión y marginalización.

Guillén utiliza el son, un género musical cubano, como base de su poesía, fusionando la musicalidad del verso con la oralidad y la narrativa popular. Sus poemas, cargados de ritmo y musicalidad, como «Búcate plata» y «Sensemayá», capturan la esencia de la vida cotidiana de los afrodescendientes cubanos, sus alegrías y sufrimientos, y su lucha por la dignidad y la igualdad.

Contribución a la literatura
Nicolás Guillén no solo revolucionó la poesía con su innovador estilo, sino que también jugó un papel crucial en el movimiento literario y cultural de la negritud. Su obra inspira a generaciones de escritores y poetas a explorar y celebrar sus raíces africanas y a abordar temas de justicia social y racial. Guillén es también una figura clave en la literatura revolucionaria, apoyando la Revolución Cubana y utilizando su voz poética para defender los ideales de libertad e igualdad.

Guillén fue un intelectual comprometido con su tiempo, colaborando con revistas literarias y políticas, participando en congresos y encuentros culturales, y manteniendo un diálogo constante con otros escritores e intelectuales de su época. Su influencia se extiende más allá de la poesía, afectando el pensamiento y la política cultural de América Latina y el Caribe.

Legado
El legado de Nicolás Guillén perdura no solo en su vasta obra poética, sino también en su impacto cultural y social. Sus poemas han sido traducidos a numerosos idiomas y siguen siendo estudiados y admirados en todo el mundo. Guillén es una figura emblemática de la literatura cubana y latinoamericana, y su trabajo continúa inspirando a nuevos escritores y poetas.

En 1983, Guillén fue galardonado con el Premio Nacional de Literatura de Cuba, y su figura es honrada en numerosas instituciones culturales y académicas. La Fundación Nicolás Guillén, creada para preservar y difundir su obra, organiza eventos, publicaciones y actividades que mantienen viva su memoria y su contribución a la cultura y la literatura.