Siete textos y una piel soleada
Por Pedro Jorge Solans desde una ventana de la casa Legany ubicada en Pellegrini 488, Villa Carlos Paz.
Piel encendida en las tinieblas
¡Piel estropeada, piel enferma, piel sufrida. En nombre de aquella piel,
de la que olí dulce, armoniosa, una noche eterna,
con ella emanando su aroma el universo en mí, te sana!
Esa piel que no está en mí
Piel en penumbras.
Piel cobre de tantos amaneceres.
Piel y solo piel de sufrir tropiezos.
Aún, así, resiste la sonrisa
con un aroma única,
como si la luz oliera a roces
apenas infinitos
de labios violetas.
Cuando la acaricio
Las caricias,
puertas abiertas
de algo que no se deja abarcar.
Refugio de un “te cuido”,
historias y más historias que se leen
por la belleza de la luz.
Caricias, gestos cómplices
de todos los verbos en uno solo.
Celebraciones en partida y regresos,
celebraciones por estar.
Las que brinda la calma necesaria
para atravesar las olas de sales
que te propone tu única travesía,
la de vivir.
El aroma de la mañana
En la taza de los suspiros
el café ya no está.
Despierta,
la mañana está hermosa.
El humo envuelve.
Los sorbos,
solo son deseos,
no preocupen sin hacen ruidos.
Infusión
los dioses lo beben.
Beben para viajar
por lugares
que solo
los corazones con piel conocen.
De corazón
Piel con aroma a lugar incierto,
piel que te da la mano,
y te lleva,
como si tus ojos iluminasen,
donde Dios está de fiesta.
Y bailamos
el mismo sueño
con sus destellos.
De no sé qué noche
Piel que huele a flor,
a canción.
Piel que huele a cielo abierto,
a noches brumosas.
Piel libre que quiere abarcar el viento.
Piel que huele,
y me pierde
la sonrisa de los tiempos.
De estrella
Escribo en tu nombre,
piel,
aroma dulce de vida.
Escribo en tu nombre,
savia,
misterio y sed eterna.
Escribo en tu nombre,
todos los nombres
de los besos perdidos.
Escribo tus ilusiones,
dios brilloso
de mis instantes.
Escribo en tu nombre,
sin saber de ti
ni siquiera, tu estrella.
Muy bello el poema 👏🏻
Bellísimo
Dijo Parfeniuk sobre este texto de Pedro Solans: «Texto muy sustancioso, fruto del árbol del dolor. Salió de adentro y están saliendo por la piel. Intensos y conmovedores poemas. Y lo más importante: ¡sanadores! Me adhiero a lo expresado por Parfeniuk
Hermoso poema