Por Laura Ortega Gámez

Diario Granma
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Pareciera que la tensión política en Argentina no cesa. Milei continúa con su estrategia de odio y junto a él, miles de personas cegadas que alimentan el ego y el desequilibrio del polémico presidente.

Esta vez, el azar quiso que coincidieran en la ciudad de Córdoba los tumultos que aguardaban la llegada del mandatario y la entrega del Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba, una de las más prestigiosas de América, al poeta y director del Instituto Cervantes, Luis García Montero.

La coincidencia hubiese resultado tal vez menos relevante si no fuese ya conocida la postura del catedrático español sobre la situación actual de Iberoamérica. Mientras afuera se preparaba el arribo de Milei para la celebración de la fiesta patria del 25 de mayo, en las aulas de la universidad García Montero realizaba un profundo estudio sobre la realidad latinoamericana, con sentencias como que «la libertad, por estos días, es la ley de la selva».

Dos charlas efectuó el intelectual en la Facultad de Lenguas de la institución, en las que realizó un análisis impecable de carácter social, mientras en el exterior, tal cual relata el periodista Pedro Solans para el Diario de Carlos Paz: «argentinos se colocan pollitos amarillos en su cabeza para recibir a Milei».

El vínculo inseparable entre el idioma, la literatura y la historia fue uno de los temas tratados por el granadino en su intervención, en la que señaló que «la historia se cuela en las palabras y discutir sobre las palabras es discutir sobre la historia».

Además, resaltó la figura de Juan Ramón Jiménez mediante sus escritos, que llamó «precisos y exactos», y recordó, mediante la historia política de la España del siglo XIX, a personalidades como Miguel de Unamuno, en una época en la que la España real se encontraba separada de la realidad, y realizó un paralelismo con los tiempos modernos, cuando, según alega, «las redes sociales crean un mundo virtual que sustituye a la realidad». En ese sentido, aludió a una frase del magnate y expresidente estadounidense Donald Trump cuando, al ser acusado de mentiroso en sus redes, respondió que él no mentía, solo creaba realidades.

«Las palabras pueden servir para entendernos, para conocer el mundo, y sirven también para engañarnos. Siempre creo que tienen razón los lingüistas que dicen que los seres humanos han sobrevivido porque han aprendido a hablar, y porque tenían el lenguaje (…). El lenguaje, y eso lo saben los lingüistas, sirve para entenderse y sirve también para engañar, y por eso en la filología constantemente hay una reflexión que apunta a como las palabras cambian de significado», señaló García Montero.