El poeta y novelista Nuno Júdice, uno de los más importantes en habla portuguesa, murió en Lisboa el domingo 17 de marzo a los 74 años, como consecuencia de una enfermedad, según informó el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa.
Nacido el 29 de abril de 1949 en Mexilhoeira Grande, Portimão (distrito de Faro, Portugal), Júdice era considerado uno de los más destacados poetas portugueses surgidos a continuación del grupo Poesía 61. Era licenciado en Filología Románica por la Universidad de Lisboa y obtuvo un doctorado de la Universidad Nueva de Lisboa, en 1989, con una tesis sobre la literatura medieval.
En la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de esa misma casa de estudios ejerció como profesor hasta 2015. Fue traductor y organizador de antologías y director de revistas literarias, entre las que se encuentran Tabacaria y Colóquio-Letras. También ejerció funciones de consejero cultural de la Embajada de Portugal en París, Francia, donde además dirigió el Instituto Camões.
Publicó, entre otros títulos, Mecanismo romântico da fragmentação, Nos braços da exígua luz, A partilha dos mitos, Lira de liquen, A condescendência do ser y Enumeração de sombras.
Recibió, entre otros reconocimientos, el Premio Pen Club (1985), el Premio D. Dinis de la Fundación Mateus (1990), el Premio Aristeion de Literatura Europea (1994) de la Asociación Portuguesa de Escritores como finalista por Meditação sobre Ruínas, el premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2013) y el Premio Iberoamericano Ramón López Velarde (2023).
Su estilo se caracterizaba por sus versos, a veces largos, discursivos, meditativos y por un tono tardorromántico que se cuestionaba la propia noción de poema. Los críticos también han destacado su tendencia evocadora, melancólica o irónica.